¿A que lleva este despotismo de prohibiciones y alertas? Al caos. A un mundo de saqueo y rapiña en el que por ejemplo, la Facultad de Economía de la Universidad de Parma, no se considera una fuente de cultura, si no una fuente de papel higiénico gratuito.
Y para qué demonios vas a molestarte en ir a un supermercati a hacer la compra, pudiendo hurtar en las maravillosas instalaciones con lema "todo para todos":
Obviando mi bajo conocimiento de italiano, quiero pensar que DESIO quiere decir 'entre', y ROBE no hace falta que lo traduzca...
Es lógico que la población media, que ya conoce todas esas artimañas, viva en la más absoluta riqueza, y se respire corrupción por cualquier esquina. ¿No lo véis claro? ¡Ojo a los pomos de las puertas!
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