Hasta la sala donde se encuentran las máquinas de café, de refrescos, o expendedora de alimentos, del edificio donde trabajo, es un buen lugar para reivindicar la alimentación sana.
Algún iluminado utilizó una tarjeta de sugerencia como post-it en una de las máquinas, para inculcar la idea: "la cuestión es alimentarse, no engordar".
Sin embargo, al día siguiente llegó la respuesta, probablemente de alguien como yo. ¿Te refieres a un genio? No, a un enamorado de los Kit-Kat y de las palmeras de chocolate de la máquina...
Lo dicho, que Fat's Power, y que me voy a seguir con la Operación Chocolás.
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